El cortometraje «Cuerdas», de la directora vasca Estíbaliz Urresola, recibió este jueves en Cannes el premio Rails d’Or, otorgado por miembros de la asociación ferroviaria Ceux du Rail a cortos y largometrajes proyectados en la Semana de la Crítica, sección paralela del certamen cinematográfico.
La directora recordó que hace dos años, en unas jornadas de ecofeminismo, escuchó la ponencia de una médica de Muskiz, Sara Ibañez, que, durante décadas, «había comprobado los efectos devastadores de la contaminación de la refinería de Petronor en la salud, no solo de las personas sino también del tejido social de su pueblo». «Su relato contenía todo lo necesario para contar esta apasionante historia que me invitaba a reflexionar sobre la importancia de la cooperación, la sororidad, la salud y el cuidado de la vida», ha explicado.
El cortometraje cuenta con la participación de Begoña Suarez, presidenta de la asociación Meatzaldea Bizirik, que, con 91 años, realiza su primera intervención frente a las cámaras así como de un numeroso grupo de mujeres con las que ensayaron durante más de dos meses.